¿QUÉ? Downforce es un juego de apuestas, carreras y cartas de 2 a 6 jugadores basado en Top Race, el premiado juego diseñado por el legendario Wolfgang Kramer. ¿Estás preparado para hacer ganar a tu coche… o el de tus rivales?
¿CÓMO? La primera fase del juego se basa en una primera ronda de adquisición de los coches mediante subasta que van a disputar la carrera. De esta forma y dependiendo del número de jugadores es posible que un jugador tenga más de un coche, pero lo que es seguro es que todos los participantes tendrán al menos uno.
Una vez subastados los coches y las habilidades especiales que podremos usar a lo largo de la partida, se pasa a la carrera. Cada jugador y por orden de turno jugará una carta y moverá todos los coches tanta casillas como diga la carta.
Los circuitos tienen tres líneas amarillas a lo largo del recorrido. Cuando un coche cruce una, cada jugador deberá hacer una apuesta sobre el ganador final de la carrera. Es decir, haremos 3 apuestas a lo largo de la partida que nos darán dinero al final de la partida dependiendo de si acertamos o no.
De esta forma tenemos 2 vías para conseguir dinero que es lo que nos dará la victoria al final de la partida. Por una parte la posición de nuestro coche al final de la carrera y por otra los dividendos obtenidos por nuestras 3 apuestas. A esto hay que restarle el valor que apostamos para hacernos con nuestro o nuestros coches en la fase de subasta. Al final de la carrera el jugador con más dinero conseguido , ganará la partida.
¿POR QUÉ? Al leer las reglas de Downforce por primera vez pensé: ¿esto es todo? A priori parece un simple juego de apuestas con gestión de la mano y poco mas. Bueno eso creía yo, pero claro los juegos, además de leerlos, hay que jugarlos, y es aquí cuando se producen las sorpresas.
Y en este caso, un sorpresón de los buenos. Por qué sí, Downforce tiene poquitas cosas, pero dan mucho juego. Lo primero es la fase de subastas de los coches. Cada jugador puja con las cartas de su mano por el coche o coches que quiere controlar. Dependiendo del número de jugadores, puede darse el caso que uno o más jugadores tengan más coches que el resto y claro no es lo mismo intentar que llegue a meta un coche que dos, y con 3 ya ni te cuento.
Lo importante de esta fase además de elegir cuántos coches quiero es que además se subastan unos poderes que podremos usar a lo largo de la partida. Esta es la parte que menos me ha gustado del juego, ya que creo que hay un par de cartas que son mejores que el resto. En concreto la carta que te permite mover tu coche en el turno de los demás y la de mover dos casillas más en rectas, aunque esta última en el circuito de Mónaco es más difícil de sacarle jugo. Además hay que tener en cuenta cuánto dinero nos gastamos en cada coche, ya que esa cantidad nos la restarán al final de la partida y creedme que suelen darse partidas muy ajustadas de puntos.
Luego viene la fase de carrera, donde por orden de turno jugaremos una carta de nuestra mano, moviendo todos los coches que indica la carta, tantas casillas como vienen indicadas. Y aquí es donde viene la diversión, ya que aunque tienes que mover todos los coches obligatoriamente, también puedes bloquearlos, dejándolos detrás de otros coches y es cuando empieza el baile de súplicas, negociaciones, y traiciones varias.
¡Mueve mi coche y te muevo el tuyo el siguiente turno! ¡No avances el rojo que se escapa! ¡Tengo muchas cartas de tu color, colaboremos! Ya os imagináis de qué va esto ¿no? Pero hay una última cosa, y es que los circuitos viene con tres marcas intermedias donde tendremos que apostar al coche ganador al final de la partida, y aquí puedes apostar por el coche que quieras, y es cuando las alianzas y los intereses de cada uno se empiezan a tambalear como un castillo de naipes.
Pero el juego no sólo va de comer orejas, sino de gestionar tu mano de cartas. ¿Gasto mis mejores cartas para mover mi coche pronto para evitar bloqueos? ¿Me dejo en la mano cartas de otro coche para buscar alianzas? ¿Cuándo juego la carta de 8 casillas para mi coche? En fin, una delicia y que a diferencia de otros juegos de carreras el azar es prácticamente inexistente (tan sólo en la mano de cartas de que te toque al principio de la carrera. Inevitable como Camep Up, otro señor juego de apuestas y carreras, pero donde el azar del dado es el que provoca las sinergias.
Muchas veces, hay indicadores fuera del juego que te dan pistas sobre si un juego es bueno o muy bueno. En el caso de Downforce, la mejor pista que he tenido es echarse una carrera y acabar jugando 4 seguidas porque todos los jugadores estábamos disfrutando de lo lindo. Hace poco hice un listado con los 10 mejores juegos de carreras y me parece que tendré que retocarla, porque este Downforce entra de cabeza en mi top. Pocos juegos ofrecen tanto con tan poco. Recomendadísimo.
Dificultad: 1.6/5
Diseño: 8.5/10
Diseñador: Wolfgang Kramer
Edita: Devir
Año de publicación: 2019
Número de jugadores: De 2 a 6 jugadores
Duración: 30 min aprox
Precio: 40 euros aprox
Banda sonora recomendada: Daddy Yankee – Gasolina
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