¿QUÉ? Es época de migraciones en el Ngorongoro y los animales tienen que cruzar el río Mara para buscar alimento y agua. Tu misión en Tembo, será llevar cuántos más animales mejor, al otro lado del río, cruzando los dedos para que no aparezca un crocodilo o un león que acabe con nuestros animales. ¿Preparados para la aventura?

¿CÓMO? Tembo es un juego de cartas muy sencillo. El objetivo del juego es llevar animales de un lado a otro del río para conseguir puntos de victoria. Antes de empezar cada jugador recibe 5 cartas de animales y 10 marcadores de un color. Además se colocan otra 5 cartas boca abajo en la mesa que representan los 5 accesos al río y el mazo de cartas restantes boca abajo.

En su turno cada jugador pondrá en juego una de las cartas de su mano en uno de los 5 accesos del río y colocará un marcador de su color sobre la carta. Si en uno de los accesos ya hubiera una carta de otro jugador, el valor de la carta puesta en juego debe ser superior a la que ya existe. Después de colocar una carta, cogerás otra del mazo para reponer tu mano.

Hay unas cartas de animales que producen unos efectos distintos a las del resto de animales. Por ejemplo el elefante, es la carta que permite cruzar los animales de un lado a otro del río, siempre y cuando haya por lo menos 3 cartas de animales sobre la entrada de un río. Si es mi turno la utilizo, deberé elegir uno de los 5 accesos (siempre y cuando contenga un mínimo de 3 animales) y los pasaré al otro lado. Cada jugador cogerá la carta con su marcador, y puntuará la cantidad indicada en su carta.

Pero no todo son buenas noticias en África. Hay cartas peligrosas como las de super cocodrilo, que al ponerla en juego elimina todos los animales que se encuentren en una de las 5 filas. El cocodrilo normal, te permite eliminar el primer animal de una fila o todos los animales de un mismo tipo que viene indicado en la misma carta.

Por último, están los leones, que al ponerlos en juego tienen el mismo efecto que el super cocodrilo, eliminando todos los animales de una fila, y bloqueando el acceso a esa fila lo que resta de partida.

El juego acaba cuando el mazo se agota. Los jugadores se anotarán los puntos de los animales que hayan conseguido cruzar el río y el ganador será el jugador con más puntos.

¿POR QUÉ? Nuevo juego de la editorial alemana NSV, famosa por sus fillers de cartas a buen precio. En esto caso, un juego sobre la migración de los animales en África, con reglas muy sencillas, una duración de 15-20 minutos y mucha interacción: un filler de toda la vida vaya.

Y la fórmula funciona, ya que el juego entretiene, y tiene algunas decisiones que enganchan lo suficiente como para querer repetir partida. El meollo del juego es poder colocar tu mano de cartas en el sitio que más te convenga. ¿Los pongo en una fila vacía? ¿Mejor los mezclo con animales de otro jugador? Y si te toca un un león o cocodrilo, ¿qué fila me cargo? ¿qué fila bloqueo? ¿A qué jugador me conviene perjudicar?

Pequeñas decisiones que te harán pasar un buen rato en familia, pero con matices. El juego es azaroso, y si bien tu decides como y cuando utilizar las cartas, estas te vienen dadas de forma  aleatoria. Puede que no te toque nunca un elefante, o un león, o que tu mano de cartas tenga números muy bajos, o muy altos y no puedas colocarlas. Si no te gusta este factor, mejor ni lo pruebes.

No os voy a engañar, hay muchos juegos del estilo de Tembo que son mejores, pero lo cierto es que he jugado 5-6 partidas en familia pasando un buen rato y metido en faena. Así que si te van este tipo de juegos rápidos y a muy buen precio, es un opción a tener en cuenta.

¿QUIÉN? Te gustará si te gusta tener muchas opciones a la hora de elegir un juego familiar.
Te gustará menos si buscas retos donde el azar no pueda ser determinante.

Puntuación: 6.4/10
Dificultad: 1/5
Diseño: 7/10
Diseñador: Andres Spies
Ilustrador: Oliver Freudenreich
Edita: NSV
Año de publicación: 2017
Número de jugadores: De dos a cuatro jugadores
Duración: 20 minutos aprox
Precio: 9.95 euros aprox
Banda sonora recomendada:  Akalé Wubé – Anbessa