Reseña: Kanagawa

¿QUÉ? En 1840, en Kanagawa, en la gran bahía de Tokio, el maestro Hokusai decidió abrir una escuela de pintura para compartir su arte con sus discípulos. Tu serás uno de esos discípulos y más que cualquier cosa. querrás demostrar tu valía como pintor.

Siguiendo sus técnicas expandirás tu estudio y pintarás tus preferencias (árboles, animales, personajes, edificios…) todo mientras prestas atención al cambio de las estaciones para conseguir la pintura más artística, que se convertirá en el trabajo de tu vida.

¿CÓMO? Kanawaga se juega en varias rondas compuestas por varios pasos. El jugador inicial primero debe robar tantas cartas como jugadores haya y las coloca en la primera fila del tablero de escuela. Estas se colocan boca abajo o boca arriba según indica el tablero. Esto se hará 3 veces durante la ronda. Primero se rellena una fila y los jugadores deciden por orden de turno, si quieren alguna de las 3 cartas.

Cada jugador debe decidir si pasa turno y no toma ninguna carta de lección, o si por el contrario decide robar carta en uno de las fases de carta. Es decir que puedes llevarte 1, 2, o 3 cartas a tu mano. Obviamente si lo haces antes de que la tercera carta sea puesta, tendrás más posibilidades de elegir el set que más te guste.

Una vez hayas escogido tus cartas por orden de turno, puedes hacer dos cosas con ellas. O mejorar tu estudio de pintura o expandir tu lienzo. Si decides mejorar tu estudio, te permitirá conseguir mejores cosas en posteriores turnos. Ejemplo: colocar un pincel nuevo, o mover un pincel.

Cuando tu lienzo haya cumplido unos requisitos (ejemplo: tener 4 árboles), puedes coger uno de los diplomas que hay sobre el tablero, que otorgan puntos al final de la partida. Sólo puedes coger un diploma de cada categoría.

La partida acaba cuando se acaba el mazo de cartas, o cuando al finalizar una ronda un jugador tiene 11 cartas en su pintura. Se obtienen puntos por número de cartas , por secuencia de estaciones iguales, puntos que vengan indicados en la cartas, losetas de diplomas y 2 puntos al jugador que tenga el peón de gran maestro.

¿POR QUÉ? Kanawaga me recuerda a Diego, un vecino que vivía en el mismo edificio que mis padres, y que es un tipo muy majo. Cuando jugábamos al fútbol, era el último en ser escogido. Pensabas en irte de expedición por el campo, y era el último al que llamabas. Diego nunca rompía un plato, era el menos travieso y el menos ruidoso. Era soso, pero buen tío.

Kanawaga utiliza diferentes mecánicas, destacando las de set collection y press your luck. Es un sencillísimo y apañado juego, donde en cada turno deberemos decidir qué set de cartas nos interesa más y arriesgar o no, para conseguirlo. Éste es sin duda el momento mas tenso  del juego, teniendo que decidir si te conformas con menos cartas. o arriesgas por conseguir más y mejores.

Después, toca decidir que hago con las carta, ¿la añado al lienzo o al estudio de pintura? Esta parte me ha recordado mucho a Augustus, donde también tienes que elegir donde colocar el elemento que acaba de salir. Si tienes que colocar mas de una carta, será importante que te pienses el orden de colocación, ya que un fallo te puede fastidiar la estrategia.

Por último, destaca la lucha por las losetas de diplomas. Aquí también tienes que decidir cuando llevártelas. Puedes conformarte con poquitos puntos pero seguros, o decidir arriesgar e intentar conseguir más tajada.

Como os decía, Kanawaga es como mi vecino Diego, majo, apañado, simpático, pero quizá un pelín intrascendente, ¿Me invitan a jugarlo? Diría que si, sin ningún problema. ¿Sacarlo yo a mesa? Se me ocurren mejores opciones. Tampoco le veo mucho más recorrido, después de 3 o 4 partidas.

Me queda añadir, que es un juego visualmente muy bonito, y eso es un punto a favor para atraer nuevas huestes. Lo dicho, un familiar majete y entretenido, que no decepciona, pero que tampoco te dejará sin dormir. Igual que mi vecino Diego.

Compra Kanagawa aquí.

¿QUIÉN? Te gustará si llevas poco tiempo en la afición.
Quizá te gusté menos si pintas canas y ya has jugado juegos familiares parecidos en el pasado.

Puntuación: 6.7
Dificultad: 1.5/5
Diseño: 8.5/10
Diseñador: Bruno Cathala, Charles Chevallier
Ilustrador: Jade Mosch
Edita: Iello
Año de publicación: 2016
Número de jugadores: De 2 a 4 jugadores
Duración: 40 min aprox.
Precio: 24 euros approx
Banda sonora recomendada: Silvio Rodríguez – Óleo de mujer con sombrero

 

7 pensamientos en “Reseña: Kanagawa

  1. Genial reseña ! 100% de acuerdo contigo. Todos hemos tenido un vecino Diego 😛
    Solo decirte que en el video hay 2 canciones, La 2ª es la que recomiendas y la 1ª que a mi me gusta mas ( pequeña serenata diurna ! )
    Grande Silvio ! 😛

    Le gusta a 1 persona

    • (Equivocaba)

      Hecha la broma de rigor… soy un anti Cathala y este… psché, no chicha no lemonade… pero partiendo de esta premisa y de que el juego para un público muy familiar puede abrumar un poco y para jugones sabe a poco he de decir que no está mal, coincido contigo, lo jugaría encantado de higos a brevas pero no lo cotizaría salvo chollazo padre.

      Por decir algo positivo comentaré que en su día me enseñaron el «Coloretto» y se me quedó muy soso, en comparación con el de los camaleones prefiero este Kanagawa (lo mismo te digo si me comentas de jugar al Augustus o a este, pasando de ese Bingus)

      Por lo demás, buena reseña y mejor blog.

      Me gusta

  2. Pingback: Gaceto partidas: Mayo 2017 | La Gaceta de los Tableros

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.